BCN World mueve varios hilos

La Generalitat de Catalunya mantiene una secreta campaña con el proyecto del macro complejo turístico del juego en Tarragona; las últimas modificaciones en cuanto al proyecto se fijaban en la restricción de las dimensiones originales planteadas por la empresa promotora Veremonte y que habían sido ya discutidas con la administración catalana. Pero la región catalana ahora es noticia por las modificaciones introducidas en el Reglamento de Casinos del Decreto 204/2001, de 24 de julio, y el Catálogo de Juegos de Casinos del Decreto 386/2000, de 5 de diciembre. Estas nuevas modificaciones han querido basar su naturaleza en una mejora de las herramientas administrativas para favorecer al mercado del juego en la comunidad catalana aunque el proyecto de BCN World podría tener mucho que ver en esta nueva etapa para la industria de los casinos.

El reglamento de los Casinos así como el Catálogo de Juegos ven así ahora nuevas implementaciones en una normativa que ha sido muy criticada por la industria del juego por mostrar un carácter bastante obsoleto que no recoge la verdadera esencia del mercado del juego de estos días, una industria que se ha posicionado líder en los mercados bursátiles internacionales más importantes. La administración catalana cumple así con su tarea de regulador del mercado del juego, una labor que le era encomendada con el Estatuto de Autonomía de Catalunya el cual le otorgaba los poderes para gestionar el mercado. La Generalitat ha sido la responsable del catálogo de jugos y apuestas así como la entidad reguladora que administraba a la red empresarial de esta industria.

La opinión pública parece entender que estas nuevas medidas puedan ser parte de una estrategia para relajar las estrictas medidas administrativas impuestas al mercado del juego, pero en especial, al sector de los casinos; ésta induce a creer que BCN World podría beneficiarse de estas nuevas medidas que reflejan una mayor libertad para que las empresas puedan realizar sus actividades. La primera de las nuevas medidas modifica el régimen interno de los establecimientos de juegos en un intento de mejorar las operaciones de cualquier casino en la región, y para ello cubre desde la regulación de las operaciones propias del juego hasta la regulación del personal de sala, mientras que la segunda medida se centra en actualizar el catálogo de juegos que data del 2000.

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